14 octubre 2011

Carbonara

Todos conocemos la clásica salsa carbonara que elaboramos con nata líquida como ingrediente principal. Pero pocos saben que la auténtica salsa italiana no lleva nata, sino huevo como base del plato.
Una de las historias de la salsa carbonara cuenta que su origen se encuentra precisamente en la zona de Carbonara, en el norte de Italia, una zona montañosa de minas de carbón, o sea, zona pobre que se abastece de recursos propios. Cuando los mineros llegaban a casa para comer, se preparaban un plato de pasta con lo que tenían en la despensa, y los ingredientes más habituales eran la manteca de cerdo, la panceta y los huevos.
El plato de pasta había que comerlo al momento, así que se sentaban a degustarlo y con el movimiento iban desprendiendo el polvo de carbón de sus ropajes que muchas veces caía sobre el plato, siendo este el origen que le da el nombre de Carbonara.





   Ingredientes:
500 gr. de espaguetis o tallarines
200 gr. de panceta o bacon
1 cebolla mediana
5 huevos
Queso parmesano
Sal, aceite de oliva y pimienta

   Preparación:
Como en todos los platos de pasta, el primer paso es cocer la pasta en abundante agua con aceite y sal.
Mientras vamos preparando la salsa. Para ello, sofreímos la cebolla muy picadita en una sartén o wok grande. Una vez pocha, le añadimos el bacon troceado para que se dore un poco.
A su vez, en un bol, batimos todos los huevos, le añadimos el queso (la cantidad depende del consumidor), un poco de pimienta y un poco de sal.


Cuando el bacon esté listo añadimos a la sartén la pasta bien escurrida, la calentamos un poco y le añadimos la mezcla de los huevo. Removemos.
El plato estará listo cuando el huevo se cuaje un poco.



Muchos italianos cambian la cebolla por ajo bien picado, pero esto, como todo, es a gusto del comensal. También podéis probar a añadir ambos ingredientes juntos.
¡Mamma mia!

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