Ayer inauguré mi piscina, así que se puede gritar ya a los cuatro vientos que comienza la operación bikini. Y al respecto os traigo hoy esta recetita para cuerpos 10.
Es un plato fresco, libre de grasas y lleno de vitaminas. Además, su mezcla de texturas, sabores y colores lo hace aún más rico.
Ya os he hablado de las propiedades de las setas y del pollo, pero nunca nos hemos centrado en el brócoli. Fijáos si es un alimento completo, que está dentro del grupo de los llamados "superfoods", o lo que es lo mismo, super alimentos, por los nutrientes y antoxidantes que que abarca.
Se ha demostrado cientríficamente que consumir pequeñas raciones de brócoli (o de coliflor o de repollo, que pertenecen a la misma familia) puede reducir el riesgo de cáncer de próstata y el riesgo de que el cáncer localizado se vuelva más agresivo. Se hace altamente recomendable en casos de cáncer de pulmón, colón y mama.
Todo eso unido a que es un vegetal muy ligero y fácil de introducir en diversas recetas, hace de el brócoli un complemento ideal en nuestra dieta todo el año.
Comenzamos.
Ingredientes:
2 pechugas de pollo.
300 gr. de brócolis.
300 gr. de setas.
Perejil.
Aceite de oliva.
Sal y pimienta.
Preparación:
Para comenzar, ponemos una olla con agua y sal a hervir. Ahí coceremos el brócoli durante 10 minutos. Después lo escurriremos y reservaremos.
Por otro lado, limpiamos bien las setas y las rehogamos unos minutos en una sartén junto con una pizca de sal, algo de pimienta y un poco de perejil.
En otra sartén con un poco de aceite de oliva doramos las pechugas de pollo troceadas. Una vez listas, agregamos las setas y un par de minutos después añadimos el brócoli troceado.
Cocinamos todo justo unos tres o cuatro minutos y servimos.
¡Buen provecho!
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