No se si os he dicho alguna vez que la pizza es mi comida favorita, y si no, pues dicho queda. Esta vez no haremos una pizza de verdad, así que no os asustéis al ver el título de la entrada. Pero lo que si haremos será jugar con la vista para que lo parezca.
La idea es buscar un molde redondo y el el hacer unos espaguetis que gratinaremos al horno con mogollón de ingredientes. Vamos, que si lo pensáis, puede ser una "pizza con base fideosa" (creo que me acabo de inventar una palabra).
Se dice que el origen de la pizza actual proviene de la antigua Italia, donde acostumbraban a elaborar el pan con forma circular y a trocearlo en porciones pra consumirlo como hoy consumimos nosotros la pizza. Era cuestión de tiempo que le empezaran a agregar algún que otro ingredientes apetitoso por encima (sólo hay que acordarse de la tostada que hemos desayunado esta mañana...yo de mantequilla y pavo).
Lo que si está claro es el lugar de desarrollo de la pizza moderna. Tuvo lugar en Nápoles, donde se le comenzó a añadir tomate, primero, y queso, después.
Cuenta la leyenda que en época de Fernando I (1751-1825) la reina había prohibido la pizza en la corte. Pero al rey de las dos Sicilias le gustaba tanto, que se las ingenió para disfrazarse de plebeyo y escaparse a un barrio pobre de Nápoles donde la preparaban. Cuando pudo confesar su gusto, la pizza se convirtió en un plato estrella en toda Italia.
Existen muchas recetas surgidas de la pizza: La focaccia (pan plano cubierto de hierbas y otros ingredientes); el calzone (una pizza cerrada a modo de empanadilla gigante); el panzerotto (es como un calzone relleno sólo pero que se frie); o el uttapam (que viene a ser lo más parecido a una pizza en la gastronomía india).
Antes de comenzar a preparar nuestra receta os tengo que confesar que, sin haber visitado Nápolés, la pizza más exquisita que he comido nunca la probé en Verona (la ciudad de Romeo y Julieta)... 1,200 kg. de pizza, en los que un kilo y cien gramos eran cuatro tipos diferentes de queso. Vamos, un abuso.
Comenzamos.
Ingredientes:
300 gr. de espaguetis.
200 gr. de champiñones.
100 gr. de jamón serrano en lonchas.
4 huevos.
300 gr. de salsa de tomate.
Queso rallado en abundancia.
2 dientes de ajo.
Orégano.
Aceite de oliva.
Sal y pimienta.
Preparación:
Como hacemos habitualmente, miestras cocemos la pasta iremos adelantando el refrito.
Para ello, pelamos y fileteamos los ajos y los refreimos un poco junto con los champiñones troceaditos.
Es hora de montar el plato. Para ello, ponemos en una fuente amplia, planita y redonda los espaguetis y los salpimentamos un poco. Sobre ellos añadimos la salsa de tomate con el fin de que cubra todo el molde. Lo siguiente será poner las lonchas de jamón y el refrito de champiñones. Cubrimos todo con queso rallado (podéis poner el que más os guste: emmental, mozzarella, pecorino, parmesano, manchego...).
Lo último será romper lo huevos crudos sobre la receta y expolvorear con orégano.
Terminamos horneando el plato a 150º C hasta que los huevos cuajen y la receta se dora un poco.
¡Mamma mia!
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